A nivel estatal, una de cada 3 trabajadoras del hogar vive bajo el umbral de la pobreza, estando expuestas a diversas formas de explotación, abusos y violaciones de sus derechos. A pesar de que la ratificación del Convenio 189 ha supuesto un primer paso importante, aún queda mucho camino para que estas trabajadoras tengan acceso a unos derechos laborales plenos.
Desde el Servicio Jesuita a Migrantes piden a los/as políticos/as que se comprometan con esta CAUSA y con estas “líneas blancas”:
- Cumplir el Convenio 189T de manera efectiva, eliminando barreras de acceso ej: procesos burocráticos y digitales
- Mejorar las condiciones laborales de las personas trabajadoras del hogar, principalmente mujeres migradas «internas» y equiparar realmente sus condiciones laborales a las del resto de los trabajadores/as.
- Adaptar el derecho a la prestación por desempleo de acuerdo a su situación laboral específica.
- Impulsar acciones de orientación y ayudas dirigidas a empleadores en situaciones de precariedad, para apoyar la contratación de acuerdo a condiciones justas.
- Instaurar dispositivos especializados en la inspección laboral, dadas las condiciones de este ámbito, que vigilen casos de vulnerabilidad y permitan actuar ante situaciones como:
· Falta de afiliación a la Seguridad Social.
· Jornadas laborales excesivas, más de 12 horas al día y más de 60 horas a la semana, así como períodos de descanso escasos o inexistentes, sin festivos ni vacaciones, especialmente para las internas.
· Realizar tareas que entrañan riesgo para su salud o su seguridad o que no les corresponden.
· Falta de remuneración de las horas de presencia
· Situaciones degradantes y vejatorias, que encierran múltiples formas de violencia, incluso el acoso sexual.
- Generar un discurso que ponga en valor la contribución de este sector, tanto en el ámbito económico como en el social y familiar.
Con tu firma apoyas a las trabajadoras del hogar y cuidadoras
(*) El objetivo del Convenio 189 sobre el trabajo decente para las trabajadoras/es domésticas aprobado hace 11 años, el 16 de junio de 2011 era: cambiar la situación histórica de injusticia social y combatir el escaso reconocimiento del trabajo doméstico, desarrollado mayoritariamente por mujeres migradas, poniendo de relieve su papel fundamental para el desarrollo económico y para la conciliación familiar.
Los/as técnicas del SJM trabajan con grupos de mujeres empleadas del hogar y están conectadas con todas las asociaciones de este sector. A la vez realizan actividades de incidencia pública, apoyadas con campañas de recogidas de firmas, y se reúnen regularmente con todos los grupos políticos y con los responsables de las áreas de Migraciones, Empleo y Genero, a nivel nacional y autonómico.
Esta recogida de firmas online se abrió en octubre de 2018, coordinada por el Servicio Jesuita Migrantes (SJM), F.Ellacuria, A.Claver, Pueblos Unidos, Migra Studio y está abierta a todas las organizaciones que compartan su objetivo y estén alineadas.
Tu apoyo es muy importante. Muchas gracias.